Líquido En El Oído (otitis Media Serosa)

Medically reviewed by Drugs.com. Last updated on Jul 7, 2024.

CUIDADO AMBULATORIO:

La otitis media serosa (OMS)

es líquido atrapado en el centro del oído, detrás del tímpano. Esta afección suele desarrollarse sin signos ni síntomas de una infección de oído. La otitis media serosa puede ser causada por una infección respiratoria superior o alergias. Es más común en el otoño y principios de la primavera.

Signos y síntomas:

Dificultad para oír
Los sonidos se oyen amortiguados
Oído tapado o sensación de oído saturado
Molestias o chasquidos en los oídos
Silbido o zumbido en su oído

Llame a su médico si:

Usted presenta dolor intenso en el oído.
La pare exterior del oído está roja o inflamada.
Tiene líquido saliendo del oído.
Usted tiene preguntas o inquietudes acerca de su condición o cuidado.

Medicamentos:

Es posible que usted necesite alguno de los siguientes:

Acetaminofén alivia el dolor y baja la fiebre. Está disponible sin receta médica. Pregunte la cantidad y la frecuencia con que debe tomarlos. Siga las indicaciones. Lea las etiquetas de todos los demás medicamentos que esté usando para saber si también contienen acetaminofén, o pregunte a su médico o farmacéutico. El acetaminofén puede causar daño en el hígado cuando no se toma de forma correcta.
AINE como el ibuprofeno, ayudan a disminuir la inflamación, el dolor y la fiebre. Este medicamento está disponible con o sin una receta médica. Los AINE pueden causar sangrado estomacal o problemas renales en ciertas personas. Si usted toma un medicamento anticoagulante, siempre pregúntele a su médico si los AINE son seguros para usted. Siempre lea la etiqueta de este medicamento y siga las instrucciones.
Los esteroides ayudan a disminuir la inflamación para que el líquido pueda drenar del oído.
Los antibióticos pueden ser necesarios si una infección bacteriana causó la OMS.

Treatment options

The following list of medications are related to or used in the treatment of this condition.

Cómo mantenerse saludable:

Lávese las manos con frecuencia durante el día. Utilice agua y jabón. Frótese las manos enjabonadas, entrelazando los dedos, durante al menos 20 segundos. Enjuáguese con agua corriente caliente. Séquese las manos con una toalla limpia o una toalla de papel. Puede usar un desinfectante para manos que contenga alcohol, si no hay agua y jabón disponibles. Enseñe a los niños a lavarse las manos y a usar el desinfectante de manos.
Evite estar con personas enfermas. Algunos microbios se propagan fácil y rápidamente con el contacto.